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Fisioterapeuta vs masajista

Tanto los fisioterapeutas como los masajistas realizan trabajos que se relacionan entre sí. Por eso, muchas personas suelen pensar que se trata del mismo especialista, nombrado de diferente manera. Sin embargo, existen ciertas diferencias entre el trabajo de cada uno. En vista de esto, ¿qué servicios debes elegir, el del fisioterapeuta o del masajista?

Fisioterapeuta, ¿qué es?

Cuando ocurre un accidente es probable que sea necesaria una intervención quirúrgica. En cualquier caso, siempre se requerirá la terapia de recuperación, la cual contribuye a que el cuerpo tenga la movilidad adecuada. Pues bien, la persona encargada de administrar dichas terapias es el fisioterapeuta.

Otro ejemplo en el que se suelen utilizar los servicios de un fisioterapeuta es para reducir y revertir los efectos del envejecimiento. Con el paso del tiempo, los ligamentos y músculos van perdiendo flexibilidad, dificultando realizar actividades que anteriormente se podían desempeñar sin mayores problemas. En este caso, los servicios del fisioterapeuta permiten mantener en buenas condiciones estas zonas del cuerpo, permitiendo mejorar la movilidad del individuo.

En resumen, el trabajo del fisioterapeuta es rehabilitar y mantener en buenas condiciones los ligamentos y músculos del cuerpo. Cabe destacar que para ejercer está profesión es necesario contar con un título universitario.

Qué es un masajista.

Como su nombre lo indica, el rango de actuación de los masajistas es precisamente aplicar masajes. Por lo tanto, es común que sus servicios se ofrezcan en zonas de relajación como en un Spa o en hoteles vacacionales. En estos casos, el propósito principal del masaje es relajar los músculos para causar una sensación antiestrés. Esto se traduce en beneficios para la salud, pues permite al paciente reducir los efectos negativos del ritmo ajetreado de las ciudades.

Ahora bien, una diferencia considerable entre un fisioterapeuta y un masajista se relaciona con los estudios que han cursado. Como dijimos anteriormente, el fisioterapeuta debe contar con una titulación para ejercer su profesión. Sin embargo, el masajista solo requerirá asistir a cursos relacionados con el tema para adquirir las habilidades necesarias. La razón principal para esto es que el masajista no está autorizado para modificar ninguna parte del cuerpo. Su trabajo sencillamente se limita, como su nombre lo indica, a aplicar masajes.

Ahora bien, lo anterior no significa que no tenga ningún valor el trabajo de los masajistas. En realidad, lo habitual es que los fisioterapeutas y los masajistas trabajen en conjunto para lograr mejores resultados con un paciente. Sin embargo, cabe destacar que el fisioterapeuta puede aplicar las terapias propias a su profesión y, al mismo, ofrecer servicios de masaje, especialmente si ha tomado los cursos pertinentes. Por el contrario, el masajista no está autorizado para aplicar terapias reconstructivas o preventivas, propiedades del trabajo del fisioterapeuta.

Con todo, algunos centros, como las residencias para ancianos, cuentan con servicios de fisioterapeutas y masajistas. En vista de la importancia que tienen los servicios de ambos especialistas, es adecuado que se ofrezcan sus servicios de forma conjunta. Esto contribuye significativamente a mejorar el cuidado de sus pacientes.