¿Te gusta practicar algún deporte? Eso es bueno, pues ayuda a liberar estrés y contribuye a tener buena salud. Sin embargo, a veces puedes tener una lesión, como un esguince, en un pie, rodilla o brazo a causa de una caída. En ese caso puedes recurrir a un especialista, pero ¿a quién? Para entenderlo, debes saber a qué se dedica cada uno. Por eso, veremos la diferencia entre fisioterapeuta vs osteopata.
Qué hace el fisioterapeuta
El fisioterapeuta te ayudará a recuperarte de las lesiones ocasionadas por esguinces o torceduras. Tal vez sólo sea necesario que aplique masajes leves si la lesión no es muy seria. Sin embargo, si la lesión es un poco más profunda o significativa, como una rodilla dislocada, se encargará que nuevamente esté en la posición correcta.
Otra situación que los fisioterapeutas pueden ayudarnos a afrontar es cuando nuestros padres ya son mayores de edad, especialmente cuando empiezan los dolores musculares y van perdiendo el equilibrio. Esto hace que sus extremidades no funcionen de forma adecuada, así que las caídas son más frecuentes. El fisioterapeuta ayudará a mejorar la movilidad en las articulaciones, como en los pies y las rodillas, que son las zonas que más se ven afectadas debido a la edad.
Por otro lado, el fisioterapeuta también tratará las lecciones debido a las caídas revisando si todos los huesos están en su posición y en buenas condiciones. En vista que las muñecas o la cadera son las zonas que más se lastiman a consecuencia, principalmente por el esfuerzo de apoyarse tratando de no caer, se dará especial atención a estas lesiones.
No solo las personas envejecidas necesitan de una terapia. Debido al estrés del trabajo, las responsabilidades familiares o la escuela puede ser necesario un masaje relajante, especialmente porque los músculos se tensan y tiende a doler. Con este tipo de terapia, el cuerpo se libera de tensión y la movilidad articular será más flexible, por lo que notarás el cambio inmediatamente.
Osteópata, ¿qué hace?
Si necesitas más que un masaje, puedes acudir a un osteópata que examinará con cuidado todo el cuerpo a base de la palpación. Con esto, encontrará cuál es la parte dañada del organismo y sabrá exactamente qué tratamiento es el más adecuado. Por ejemplo, si la columna necesita alinearse debido a una escoliosis, el osteópata sabrá cómo corregir la afección
En otros casos, el problema se deriva de una alteración visceral. A modo de ejemplo, una gastritis crónica puede causar dolor de espalda, así que el osteópata revisará cómo está el páncreas, hígado y riñones. Así, una vez atendidas las molestias, percibirás una mejoría significativa y, en el mejor de los casos, ya no tendrás que tomar más medicamentos. Una vez curado el problema no necesitarás acudir periódicamente a un osteópata.
Además, debido al estrés muchas personas padecen episodios de cefalea, o dolor de cabeza. Aunque tomen medicamentos las molestias persisten. Pues bien, las terapias del osteópata pueden ayudar a corregir el sistema nervioso estimulando la movilidad del líquido cefalorraquídeo. Con eso, habitualmente desaparece el dolor de cabeza y disminuyen los niveles de estrés.
Como puedes notar,existe una clara distinción entre las actividades de un fisioterapeuta y osteópata.